
Déficit de vitamina D
Cantidades insuficientes de vitamina D durante el embarazo pueden dar lugar a una descendencia obesa
La ingesta insuficiente de vitamina D durante el embarazo puede dar lugar a una descendencia obesa.
Según la Asociación Americana del Embarazo, entre el 40 y el 60% de la población estadounidense, incluidas las mujeres embarazadas, tiene un déficit de vitamina D. Obtener la cantidad suficiente de la vitamina del sol es un reto, ya que hay muy pocos alimentos que la contengan; por ejemplo, los huevos, los champiñones, el pescado graso y los alimentos enriquecidos como la leche, el queso, el yogur y los cereales son las principales fuentes dietéticas de vitamina D. Por suerte, nuestro cuerpo sintetiza aproximadamente el 95% de la vitamina D que necesitamos a partir del sol.
La vitamina D es una vitamina liposoluble.
La vitamina D es una vitamina liposoluble, conocida por su importante papel en el mantenimiento de unos dientes y huesos sanos. Su deficiencia en adultos se ha relacionado con enfermedades cardíacas, cáncer y diabetes. Durante el embarazo, su carencia podría dar lugar a niños obesos: esa es la conclusión según un estudio publicado en la revista Pediatric Obesity.
Más de 500 madres participaron en un estudio sobre la vitamina D en el embarazo.
En el estudio participaron más de 500 madres. Se midieron sus niveles de vitamina D en su primera visita prenatal y se tomaron posteriormente las medidas de altura y peso de sus hijos en edad preescolar, a los 4 y 6 años. Descubrieron que la deficiencia de vitamina D en las primeras etapas del embarazo se asociaba con un mayor IMC en los niños y más grasa corporal a los 4 y 6 años.
En este estudio alrededor de 2/3 de los participantes tenían deficiencia de vitamina D al inicio. Es importante tener en cuenta que, como muchos otros nutrientes, la ingesta recomendada de vitamina D es mayor para las mujeres embarazadas; aumenta durante el embarazo, de 400IU a 600IU. Se recomienda suplementar con una vitamina prenatal antes de quedarse embarazada, aunque la mayoría sólo contienen unas 400IU. Para asegurarte de que ingieres la cantidad suficiente, procura comer alimentos que contengan vitamina D y acostúmbrate a dar un paseo al aire libre de 10-15 minutos. Cumple una doble función: te ayuda a mantenerte activo y te aporta una dosis de la vitamina del sol.
Publicado el 1 de mayo de 2018