Algunas investigaciones anteriores sugieren que la antocianina C3G de la naranja sanguina (también presente en las fresas, los arándanos, las frambuesas y las uvas rojas) merece todo el mérito, ya que aumenta la quema de grasa y la conversión de calorías. Sin embargo, los ratones alimentados con extracto de antocianina aún ganaron algo de peso, una prueba más de que el alimento completo siempre es mejor que la suma de sus partes. Por ejemplo, las naranjas sanguinas también son ricas en fibra, que puede triplicar la pérdida de peso, y la fibra de pectina en particular, que ayuda a las personas que hacen dieta a sentirse más llenas. Las naranjas sanguinas también son ricas en vitamina C, que puede contribuir al metabolismo, durante el ejercicio.
Bonus: Las naranjas sanguinas pueden tener beneficios más allá de la pérdida de peso. El consumo elevado de cítricos se relacionó con un 50% menos de riesgo de cáncer de boca, garganta y estómago, en un estudio.
Publicado el 1 de marzo de 2010