Para los 16.000 estadounidenses diagnosticados de cáncer de esófago cada año, el pronóstico suele ser desalentador, ya que sólo uno de cada diez sobrevive más de cinco años. Afortunadamente, hay buenas noticias en el horizonte: Las nuevas investigaciones sugieren que las fresas podrían ayudar a detener el crecimiento de las lesiones precancerosas de garganta.
Investigadores de la Universidad Estatal de Ohio colaboraron con un equipo de China, donde las tasas de cáncer de esófago son más elevadas, debido a la prevalencia combinada de factores de riesgo como el tabaquismo, el abuso del alcohol y el consumo excesivo de sal. En el estudio participaron 36 pacientes (de 55 años de media), que padecían cáncer de esófago leve o moderado. Tras seis meses de consumo diario de fresas liofilizadas, el 84% de los que padecían cáncer leve habían mejorado, y el 60%, cáncer moderado. Según el Dr. Tong Chen, que presentó los resultados en una reunión reciente de la Asociación Americana de Investigación sobre el Cáncer, "descubrimos que el consumo diario de fresas suprimía varios biomarcadores implicados en la carcinogénesis esofágica, como la proliferación celular, la inflamación y la transcripción de genes".
Estos resultados se basan en investigaciones preliminares de laboratorio anteriores en las que muestras de fresas suprimieron la proliferación de cultivos celulares de cáncer de colon, próstata y boca. Se están estudiando otros posibles beneficios de los compuestos de la fresa. Por ejemplo, se ha descubierto que las dietas con suplementos de fresas ralentizan e incluso invierten el deterioro cerebral relacionado con la edad en ratas. Investigadores canadienses descubrieron que añadir fresas a la dieta de pacientes con factores de riesgo de cardiopatías reducía el colesterol LDL (malo) en un 13%. ¿Y quién no quiere comer más fresas? Una taza de estas deliciosas bayas aporta un 140% de vitamina C, un 30% de manganeso y un 12% de fibra, todo ello por tan sólo 46 calorías.
Bonus: Una dieta rica en fruta rica en nutrientes como las fresas puede ayudarle a evitar la obesidad, que cuadruplica las posibilidades de desarrollar cánceres de la parte superior del estómago o el esófago. Prueba las fresas en nuestra Ensalada de bayas mixtas con vinagreta balsámica.
Publicado el 1 de junio de 2011