Justo a tiempo para el "Mes Nacional de la Fresa" de mayo, los científicos añaden "anticáncer" a la larga lista de posibles beneficios para la salud de las fresas. Así lo sugiere un nuevo estudio de la UCLA: Los extractos de fresa detuvieron el crecimiento de células cancerígenas en ensayos de laboratorio.
Los investigadores atribuyen a las antocianinas de las muestras de fresa la supresión de la proliferación de cultivos de células cancerígenas de colon, próstata y boca. Las antocianinas son los compuestos que confieren las tonalidades bermellón y violeta a las bayas, las uvas e incluso la col lombarda. Se cree que las antocianinas son en parte responsables de los beneficios para la salud del corazón y el cerebro del vino tinto y los arándanos, respectivamente, según investigaciones preliminares.
Además de antocianinas, las fresas contienen quercetina, que puede desempeñar un papel en el Alzheimer al proteger las células cerebrales de la oxidación, según indican estudios de laboratorio. Los investigadores de Tufts descubrieron que las dietas suplementadas con fresas ralentizaban e incluso invertían el deterioro cerebral en estudios con animales. Otro compuesto de la fresa, el C3G, podría ayudar a controlar el peso regulando el apetito y aumentando el metabolismo de las grasas.
Publicado el 1 de mayo de 2008