¿Buscas todas las armas posibles en la batalla contra el bulto? ¡Coge uvas (con pepitas)! Las investigaciones preliminares sugieren que los compuestos polifenólicos de las semillas de uva pueden repeler los kilos. Investigadores japoneses analizaron el aumento de peso de ratones alimentados con una dieta rica en grasas, con o sin extracto de semillas de uva. Durante un periodo de tres meses, los ratones alimentados con semillas de uva ganaron un 16% menos de peso con una dieta rica en grasas que los del grupo sin uva. Además, el grupo sin uva acabó con un 216% más de grasa abdominal (el tipo más peligroso) y un 27% más de colesterol.
No interprete estos resultados como una licencia para derrochar: El grupo de semillas de uva alimentado con grasa terminó con un 8% más de peso y un 22% más de barriga que al principio del estudio. Pero la semilla de uva pareció restringir la síntesis de grasa y aumentar el metabolismo de la grasa - al igual que los compuestos en las naranjas de sangre, mandarinas y curry. Mientras tanto, un estudio del Estado de Michigan descubrió que las uvas mejoraban la función cardiaca y reducían la presión arterial cuando se mezclaban con la alimentación rica en sal de las ratas. Otro estudio básico que utilizó un modelo para la enfermedad de Parkinson descubrió que el extracto de uva mejoraba la movilidad y la longevidad. El zumo de uva también ayudó a aumentar el colesterol HDL (bueno) en un ensayo de la Universidad de Boston.
Para disfrutar de las uvas de una forma deliciosa, pruebe la receta destacada de este mes: Ensalada Waldorf con manzanas, uvas y nueces a la vinagreta.
Publicado el 1 de octubre de 2011