Cada año se diagnostican aproximadamente 12.000 nuevos casos de cáncer de cuello de útero, de los cuales aproximadamente el 32% son mortales. Gracias a un cribado eficaz, muchas mujeres pueden curarse. Y gracias a las nuevas investigaciones sobre prevención, la dieta y el estilo de vida adecuados pueden reducir significativamente las probabilidades de desarrollar este cáncer mortal. Dos armas sólidas contra el cáncer de cuello de útero parecen ser una dosis diaria de té verde y verduras frescas.
Ese fue el resultado de un estudio realizado por investigadores chinos que analizaron a un grupo de 1.040 mujeres, con una media de edad de 44 años, y siguieron su ingesta dietética durante dos años para ver cómo la dieta podía afectar al riesgo de cáncer de cuello de útero. De los diversos factores dietéticos, sólo destacaban dos. Las que bebían té verde a diario redujeron su riesgo en un 45%, mientras que la ingesta de verduras disminuyó el riesgo en un 10%. Aún más alentador es el hecho de que investigaciones anteriores sugirieron que las mujeres que comen más verduras tienen un 50% menos de probabilidades de sufrir el tipo de infecciones persistentes por VPH que pueden provocar cáncer de cuello de útero e infertilidad. Por otro lado: Los datos muestran que las mujeres con el mayor consumo de grasa animal tienen un 70% más de riesgo.
Un beneficio secundario de las verduras y el té verde es que ambos pueden ayudar a controlar el peso - importante, ya que las mujeres obesas tienen el doble de probabilidades de desarrollar adenocarcinoma cervical (un cáncer de cuello de útero maligno). Independientemente del peso y del sexo, el té verde ofrece además otros beneficios, como una mejor salud dental, una menor vulnerabilidad a los alérgenos y un posible menor riesgo de padecer otros tipos de cáncer.
Publicado el 1 de febrero de 2013
