
Vitamina A para la diabetes
La vitamina A hace algo más que mejorar la vista
Conocida como la vitamina de la vista, la vitamina A tiene una nueva fama. Desde la producción de glóbulos blancos hasta la remodelación ósea y el rejuvenecimiento de la piel, la función más reciente de la vitamina A es mejorar el funcionamiento de las células beta en los diabéticos. En las primeras etapas de la vida, la vitamina A desempeña un importante papel en el desarrollo de las células beta, lo que conduce a un funcionamiento adecuado para combatir la inflamación en la edad adulta. Las células beta, que almacenan y liberan la hormona insulina para ayudar a regular los niveles de glucosa en sangre, tienen un gran receptor en la superficie celular para la vitamina A.
Los investigadores descubrieron que cuando se bloqueaba la superficie de vitamina A en las células beta, se producía un deterioro del 30% en la secreción de insulina. Esencialmente, sin vitamina A, las células beta se volvieron menos resistentes a la inflamación. Cuando la célula carece por completo de vitamina A, muere. Esto nos lleva a comprender la formación de las células beta de la diabetes de tipo 1 y 2 desde las primeras etapas y cómo podemos intervenir.
Aunque queremos que los diabéticos tengan suficiente vitamina A en su cuerpo, demasiada de algo bueno puede plantear riesgos. Lo más preocupante es una sobredosis de vitamina A a través de suplementos, ya que puede provocar osteoporosis y efectos secundarios no deseados en el autocontrol de la diabetes, lo que refuerza nuestra evidencia de que los suplementos son innecesarios y potencialmente perjudiciales. Sin embargo, superar el límite máximo a través de la alimentación no plantea riesgos, lo que supone otra razón para utilizar la alimentación como medicina.
La mejor forma de obtener una dosis saludable de vitamina A es a través de frutas y verduras. Por término medio, un adulto necesita entre 700 y 900 microgramos de vitamina A al día. A menudo encontramos la vitamina A en los alimentos de color naranja y amarillo, destacando el betacaroteno que comúnmente reconocemos. Nos vienen a la mente las zanahorias, el mango, el boniato y la calabaza, pero no hay que descartar la col rizada, el brócoli o las espinacas, ya que también contienen una gran cantidad de vitamina A. Estos alimentos no sólo ayudan a combatir la diabetes, sino también la salud ósea. A modo de comparación, una batata entera contiene aproximadamente 1.400 microgramos por patata y las espinacas cocidas rinden unos 570 microgramos por taza. Así que no es de extrañar que la Guarnición de boniato asado con espinacas de Dole solo tenga 10 ingredientes naturales y, sin embargo, cubra el 690% de tus necesidades diarias de vitamina A relacionadas con la alimentación.
Publicado el 1 de agosto de 2017