El brócoli puede ser el mejor amigo de los diabéticos, ya que protege los vasos sanguíneos de daños que cuadruplican el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas. El elevado nivel de azúcar en sangre de los diabéticos puede triplicar sus niveles de radicales libres, moléculas inestables que causan estragos en las células sanas, incluidas las que recubren el interior de nuestras arterias y venas. La salud vascular comprometida contribuye a una serie de males diabéticos, que van desde la insuficiencia renal hasta el infarto de miocardio y el ictus. Afortunadamente, nuevas y alentadoras investigaciones sugieren que el consumo de brócoli puede contrarrestar esta disfunción.
Investigadores británicos que observaron el revestimiento de los vasos sanguíneos humanos en condiciones de laboratorio descubrieron que el sulforafano -un antioxidante indirecto presente en el brócoli y otras verduras crucíferas- reducía la producción de radicales libres en un 73%. El sulforafano desencadena una reacción bioquímica en cadena, activando las enzimas desintoxicantes de fase II, que a su vez protegen el sistema circulatorio del organismo del estrés oxidativo.
Todo el mundo, incluidos los diabéticos, puede disfrutar de otras innumerables ventajas del brócoli para la salud. Además de ser un potente antioxidante, el brócoli también es beneficioso para el corazón, los huesos y la próstata. Otros beneficios pueden sorprenderle: El brócoli podría proteger el cerebro en caso de traumatismo craneal.
Publicado el 1 de diciembre de 2008
